Violencia sexual vivida por varones: una mirada desde las construcciones de género
Synopsis
Ésta es una de las frases con las que la autora de este libro delimita sus conclusiones. Esto que pareciera tan obvio desde algunas lecturas, es un elemento polémico desde otras, según las cuales las mujeres son quienes han sido acosadas y hostigadas
sexualmente por varones, dentro de una sociedad patriarcal calificada como misógina y sexista. En dicha sociedad se ha cosificado el cuerpo de las mujeres, construyéndose como objeto de deseo y consumo por parte de sujetos del sexo masculino, privilegiando una lógica heterosexual. Existen diferentes campañas para denunciar e idealmente prevenir el acoso sexual hacia las mujeres, algo que en algunos contextos se enfrenta a obstáculos de tipo estructural, ya que las campañas publicitarias y otros referentes simbólicos reproducen la imagen de los cuerpos de las mujeres como producto a ser vendido, a la par de otras mercancías que se socializan. En transportes públicos de la ciudad de México existen espacios especiales para las mujeres, con el propósito de evitar o prevenir acoso sexual: se dispone de vagones para mujeres en el Metro y en el Metrobús, mientras que se han concesionado autobuses y taxis exclusivamente para dicha población. Por otra parte, quienes investigan la trata de personas destacan que los hombres son los principales consumidores y si bien no se limita dicha trata al comercio sexual, sí lo identifican como uno de sus componentes principales. Paralelamente, quienes investigan prostitución y trabajo sexual, afirman (y a veces asumen) que los consumidores mayoritariamente son varones.