La orientación laboral como política activa de empleo en Andalucía
Synopsis
La finalidad de las Políticas de Empleo es la creación de puestos de trabajo, para insertar a la población activa en el mercado laboral a través de un ajuste
correcto entre la oferta y la demanda, velando por la calidad y amparando las situaciones de desempleo (Artículo 1 de la Ley 56/2003 de Empleo). Sin
embargo, la finalidad de dichas políticas de empleo y su capacidad para insertar a los desempleados en el mercado laboral, está muy lejos de ser
materializada. España padece un grave problema del desempleo que ha sido achacado a la crisis económico-financiera desatada en 2008 (Medina Moral
et al., 2010; Colectivo IOÉ, 2011; Rocha, 2012) y que en seis años, desde 2007 a 2013, dejó sin empleo a casi tres millones de ciudadanos (véase el anexo 3).
Una idea buena no siempre alcanza resultados exitosos. Éste es el caso de las Políticas de Empleo implementadas en Andalucía. El asesoramiento y la
creación de itinerarios personalizados con los que procurar y facilitar la inserción de los desempleados es una política necesaria para mejorar el capital humano en Andalucía. Sin embargo, en su desarrollo o ejecución existen factores que impiden alcanzar el propósito deseado.